Michael Wesch, de la Universidad Estatal de Kansas, publicó una excelente nota sobre la evolución del entorno educativo en los últimos diez años. No se refiere a la proliferación de elementos tecnológicos como pizarras digitales, sino al cambio sutil en la relación entre los alumnos, los docentes y la información. Michael menciona que históricamente el aula ha funcionado bajo la premisa que la información es escasa y difícil de encontrar, por lo tanto se requiere una estructura jerárquica que apoye el conocimiento y la autoridad del maestro. Pero ahora, prácticamente toda la información producida y acumulada por el ser humano existe en y fluye a través de iPods, celulares y laptops. Por lo tanto, se vuelve menos importante que el alumno memorice y repita información, y más importante que aprenda a encontrar, organizar, analizar, compartir, discutir, criticar y crear información. "They need to move from being simply knowledgeable to being knowledge-able", que muy aproximadamente podría tradicirse como dejar de simplemente conocer y pasar a estar habilitados para el conocimiento.
El cambio al que alerta Michael no solo es cuantitativo - además del volumen de información disponible, las posibilidades para crear, administrar, leer, criticar y organizar dicha información son amplísimas. El paradigma educativo todavía existente en las aulas se ha quedado corto en el contexto de los nuevos medios. Hoy el alumno tiene la posibilidad de compartir e intercambiar el conocimiento, debatiendo, colaborando e incluso creando y aportando nuevos conocimientos. Además, el intercambio y la colaboración ya no están limitados a los alumnos, porque el docente ya no es el portador exclusivo de la verdad (aunque todavía hay muchos que así lo consideran...).
Al final de la nota, Michael habla de lo que el llama "subjetividades". El propone que ya no se debe hablar de materias ("subjects") sino de subjetividades - formas de observar, comprender e interactuar con el mundo. Es importante entender que nuestro nuestro contexto social, cultural o histórico determina cuales son las "verdades" de cualquier materia o tema de estudio, y esto no se puede enseñar mas que a través de la práctica (Michael habla un poco sobre el simulador que desarrolló con este objetivo en mente para su curso sobre Antropología Cultural).
Lo primero que me saltó a la mente cuando leí sobre la idea de "subjetividades" es que, en un mundo con tanta información disponible fácilmente, y donde esta información se actualiza a cada segundo, se vuelve imposible establecer una verdad absoluta. ¿No deberíamos pensar en dejar de enseñarle a nuestros alumnos y comenzar a explorar con ellos?
Gracias a Stephen Downes por mencionar esta nota...
El cambio al que alerta Michael no solo es cuantitativo - además del volumen de información disponible, las posibilidades para crear, administrar, leer, criticar y organizar dicha información son amplísimas. El paradigma educativo todavía existente en las aulas se ha quedado corto en el contexto de los nuevos medios. Hoy el alumno tiene la posibilidad de compartir e intercambiar el conocimiento, debatiendo, colaborando e incluso creando y aportando nuevos conocimientos. Además, el intercambio y la colaboración ya no están limitados a los alumnos, porque el docente ya no es el portador exclusivo de la verdad (aunque todavía hay muchos que así lo consideran...).
Al final de la nota, Michael habla de lo que el llama "subjetividades". El propone que ya no se debe hablar de materias ("subjects") sino de subjetividades - formas de observar, comprender e interactuar con el mundo. Es importante entender que nuestro nuestro contexto social, cultural o histórico determina cuales son las "verdades" de cualquier materia o tema de estudio, y esto no se puede enseñar mas que a través de la práctica (Michael habla un poco sobre el simulador que desarrolló con este objetivo en mente para su curso sobre Antropología Cultural).
Lo primero que me saltó a la mente cuando leí sobre la idea de "subjetividades" es que, en un mundo con tanta información disponible fácilmente, y donde esta información se actualiza a cada segundo, se vuelve imposible establecer una verdad absoluta. ¿No deberíamos pensar en dejar de enseñarle a nuestros alumnos y comenzar a explorar con ellos?
Gracias a Stephen Downes por mencionar esta nota...
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